Redacción
Miriam Díaz-Aroca da vida a Vicenta, la madre de Federico García Lorca, en una producción de Apata Teatro.
Llega al festival una obra de Cervantes nunca antes representada en teatro profesional, y estrenada cuatro siglos después de haber sido escrita.
Dos coproducciones del festival se podrán ver esta semana en el Patio del Castillo: La casa de los celos y selvas de Ardenia, y After·Sun
El XXVI Festival de Teatro Clásico Castillo de Peñíscola cierra esta edición con dos homenajes a dos grandes autores del siglo XX: Lorca y Gorki.
El XXVI Festival de Teatro Clásico Castillo de Peñíscola, organizado por la Diputación de Castellón, llega a su recta final, con dos coproducciones: La casa de los celos y selvas de Ardenia, de Cervantes, que se estrena profesionalmente cuatro siglos después de haber sido escrita, y After·Sun, basada en Veraneantes de Gorki, una de las grandes obras del teatro ruso. Ambas forman parte del nuevo rumbo que ha dado el festival en esta edición, el de ser generador de espectáculos, pues ha tenido tres coproducciones y una producción propia.
Además, en esta nueva etapa del festival, y ya que Peñíscola y su castillo son lugares íntimamente vinculados a la Historia, el director del festival, Javier Sahuquillo, que también es historiador, ha querido ofrecer en su programación 25 siglos de Historia del Teatro. Por eso, tras la propuesta sobre el Papa Luna en el Salón Gótico, la programación en el Patio de Armas comenzó con un repaso a la mitología grecolatina de manos de Fernando Cayo y, tras pasar por Cervantes, Calderón, Molière y Fernando de Rojas, finaliza con un doble homenaje a dos autores clave en los primeros años siglo XX, y ambos fallecidos en distintas circunstancias en 1936. Tras el homenaje a Gorki con la versión de Veraneantes, escrita en 1904, llega otro homenaje para clausurar el festival, en este caso a otro de los grandes autores del siglo XX, Federico García Lorca. Se trata de Lorca, Vicenta, una obra que se centra en la madre del poeta, y que muestra la trascendencia que ella tuvo para que Federico llegase a ser quien fue.