Redacción
Turistas españoles venidos de Extremadura, Castilla y León y Madrid, encuentran en Figueira da Foz su segundo hogar, y ahora, además, cuentan con un rincón de lujo.
Cerca de Coimbra, en el centro de Portugal, se encuentra una localidad que mira al Atlántico cada día y se deja recorrer por sus impresionantes arenales. Figueira da Foz es un destino que sorprende por sus salinas, parajes naturales como el cabo Mondego, donde los atardeceres se disfrutan en slow motion, y una gastronomía marinera de primer nivel, la convierten en un destino ideal para el verano. Y allí, un tesoro. Un espectacular hotel boutique que hará las delicias de los amantes de la arquitectura posmodernista: Vila Galé Collection Figueira da Foz.
La pasada primavera abría sus puertas este precioso hotel tras un lavado de cara. Inaugurado en junio de 1953 como Grande Hotel da Figueira, este gran símbolo de Figueira da Foz, diseñado por el arquitecto Inácio Peres Fernandes, está clasificado como edificio de interés público desde 2002. Hoy conserva el encanto de antaño, su estética posmodernista de los años 50, que lo convierte en un irresistible para los amantes de los edificios con historia.
En su interior aguardan 102 habitaciones y zonas comunes donde se sigue apostando por esa estética posmodernista en la que predominan los tonos ocres y suaves, dotando a las estancias de esa elegancia y sobriedad inconfundibles.
¿Para comer? Fácil, el restaurante Versátil, con una amplia selección de la mejor gastronomía de cercanía y productos frescos de temporada. La otra opción es Inevitável Steak Lounge, con terraza bar. Una cocina de autor, con propuestas sorprendentes en un ambiente elegante y sofisticado, donde las líneas rectas y la elegida iluminación son claves para proporcionar esa aura que muchos buscan en un almuerzo o cena de excepción.
Para escapar de la vorágine de la urbe y todos los agobios, el hotel cuenta con su Satsanga Spa & Wellness, ideal para recibir un tratamiento de masaje personalizado en un ambiente sobrio y calmado. Como complemento, una sesión de sauna y un reparador jacuzzi, pondrá el cuerpo a funcionar a pleno rendimiento.
Pero lo mejor de Vila Galé Collection Figueira da Foz es su emplazamiento. Las vistas al Atlántico y al kilométrico arenal generan sensaciones encontradas. Por una parte, invita a quedarse maravillado en el balcón, a contemplar la espectacular postal; pero, por otra parte, es una invitación a pasearlo palmo a palmo, dejando que el agua del mar nos dé en los pies mientras se divisa el atardecer.
Gracias también a su ubicación, desde el hotel Vila Galé Collection Figueira da Foz se pueden visitar a pie algunos de los lugares de mayor interés turístico, como el fuerte de Santa Catarina, la picota, el casino o el pintoresco mercado. A pocos minutos en coche, se accede fácilmente a las playas más famosas de la región, como Buarcos o Quiaios, a los miradores de la sierra de la Boa Viagem, en especial al mirador de Bandeira, o a las salinas y los arrozales.
Para aquellos que buscan un destino al que escapar del ajetreo diario, que necesiten ese rincón especial donde dejar que el tiempo pase sin mirar el reloj, y que además quieran ser mimados y atendidos como en su propia casa… El centro de Portugal es el destino y Vila Galé Collection Figueira da Foz su alojamiento.
