Redacción
En la última semana de julio concluyó la estancia en la provincia de Albacete de los y las 36 jóvenes de cuatro nacionalidades diferentes (9 por país) que han venido participando en el proyecto europeo ‘Repoblando Futuro’ impulsado por la Diputación con la implicación de protagonistas de España, Italia, Bulgaria y Croacia.
Jornadas que han disfrutado con Alcaraz ejerciendo de perfecta ‘sede de operaciones’ de este encuentro que ha sido muy esperado y cuidado por la institución provincial a través de su Servicio de Juventud y Deportes, y que ha servido de ‘colofón’ al proyecto provincial subvencionado por el programa europeo ‘Erasmus +’ de intercambios juveniles con una aportación que ha rondado los 18.000 €.
Estos chicos y chicas, que durante su estancia en territorio albacetense han sido recibidos en el Palacio Provincial por el vicepresidente responsable del área, Juanra Amores, y por el diputado de Juventud y Deportes, Dani Sancha, han participado a lo largo de estos días en diversos talleres y actividades monitorizados por la empresa Dramblys.
A través de dinámicas de equipo y sesiones de debate, han incidido en el estudio que durante estos meses han venido realizando para explorar las causas de la despoblación desde las experiencias de sus respectivos países de origen, así como sus posibles soluciones, manifestando creativamente los y las participantes su opinión elaborando vídeos, dibujos, micro relatos, collages de fotos y cartelería.
Las monitoras de Dramblys les guiaron en el análisis de las causas y posibles soluciones al fenómeno de la despoblación partiendo de la realidad de los diferentes países de origen y durante encuentros en los que hablaron: de desempleo y salarios precarios; de lo vital que resulta contar con un sistema sanitario y con infraestructuras y transportes adecuados; de la necesidad de invertir en Educación, en ‘vida cultural’ y opciones de ocio o de entretenimiento en estos enclaves, etc.
Días de trabajo, turismo y convivencia
Durante estas jornadas han estado pernoctando en el Albergue Municipal de Alcaraz, lugar del que han disfrutado enormemente a través de distintas visitas guiadas que, entre otros muchos ‘tesoros’, les han descubierto las míticas Torres de la Trinidad y del Tardón, la Almazara de aceite ecológico de la localidad, pudiendo también vivir de una ‘noche mágica temática’ celebrada en el castillo y maravillarse con la calidad del cielo nocturno de la zona a través del ‘astroturismo’ del que eran testigos desde el Mirador Estelar creado este mismo año en el municipio por la Diputación.
Además, han disfrutado de actividades de carácter más deportivo (por ejemplo, realizando trekking por Los Batanes, o protagonizando una divertida gimkana por Alcaraz) pero, más allá de esta localidad que les ha servido de gran punto de encuentro, han conocido otros pueblos emblemáticos de la comarca, como El Ballestero (donde han visitado el Museo Etnográfico), El Bonillo (donde han compartido comida y una divertida jornada de piscina), Lezuza (donde han podido admirar el espacio arqueológico de Libisosa) o San Pedro (donde, tras conocer la localidad, han disfrutado de una cena con productos típicos de la provincia).
Jornadas intensas y enormemente productivas que, además, han estado salpicadas de ‘noches temáticas’ en las que los y las jóvenes de cada país han mostrado el resto las tradiciones culturales más emblemáticas de sus distintos lugares de origen: Italia, Bulgaria, Croacia y, cómo no, España (entre cuyas costumbres contaban que han sido muy apreciadas las cualidades de ‘the siesta’).
En definitiva, ha sido una especie de ‘convivencia’ que ha venido a cerrar el trabajo realizado durante los últimos meses por estos 36 chicos y chicas dentro de una experiencia que ha resultado especialmente complicada por la pandemia de la COVID-19 pero que ha podido ir sorteando sus obstáculos apostando por la celebración de numerosas citas que, de forma telemática, han permitido abordar diversas cuestiones de fondo del programa hasta que, finalmente y bajo todos los protocolos y medidas de seguridad y todos los controles sanitarios pertinentes, se ha podido concluir con este encuentro que, ya de forma personal, les ha permitido convivir con los compañeros y las compañeras con los que han compartido esta ‘aventura’ a lo largo de los meses analizando, desde distintas ópticas, culturas y países, el fenómeno de la despoblación.
Un trabajo desarrollado a lo largo de los meses ‘conectando’ a jóvenes de distintos puntos de Europa y su visión del fenómeno de la despoblación
En el caso de Bulgaria, se ha trabajado de la mano de la organización ‘Association International Youth Comitte’, de la localidad de Kostinbrod, cercana a la capital del país (Sofía). En el de Italia, se ha colaborado con la Asociación ‘Malik Cultural’ de Cagliari (Cerdeña) y, en el de Croacia, con la asociación ‘Institute of Youth Power’, de la ciudad de Rijeka.
Durante estos meses, los y las protagonistas de ‘Repoblando Futuro’ han participado (y animado a participar a jóvenes de su entorno) en la encuesta que la Unión Europea realizó sobre la visión de las zonas rurales. También han seguido la página de la Red Europea de Desarrollo Rural con ideas muy interesantes (como por ejemplo uno de los talleres de trabajo que convocan con el fin de elaborar iniciativas que después llegan a Europa y se convierten en propuestas de acción). Y han intervenido en distintos espacios radiofónicos hablando del proyecto (algo que tuvo su epicentro con motivo de la celebración del ‘Día de Europa’ en el propio Palacio de la Diputación Provincial).
En el seno de esta actividad desarrollada a lo largo del tiempo, estos chicos y chicas han puesto de manifiesto que hay muchas cuestiones que preocupan a los jóvenes que viven en localidades pequeñas del ámbito europeo y para las que reivindican el interés de las instituciones: entre ellas, las comunicaciones, las dificultades de acceso a la vivienda, los problemas para conocerse y relacionarse con chicos y chicas de pueblos vecinos (algo que se ha agravado con los impedimentos que viene generando la pandemia), o la necesidad de articular nuevos apoyos para ayudar a fijar población en el medio rural.
En nombre de la provincia de Albacete, han representado a los y las jóvenes del territorio en este proyecto: Carolina Oliver Herraiz (de Abuzaderas, pedanías de Albacete capital), Nuria Carreño Rodríguez (de Alcaraz), María Felicita Moreno Sierra (de El Bonillo), Carmen Sánchez Muñoz (de Elche de la Sierra), Elena Alfaro Sigüenza (de Minateda, Hellín), Javier Aparicio González (de Higueruela), María López Cuchillo (de Molinicos), Clara Cañadas Rodríguez (de San Pedro) y Ainhoa Esteve Alcaraz (de Tobarra).