Redacción
Chinchilla de Montearagón ha acogido la presentación del libro «El monumento orientalizante de Pozo Moro (Albacete)», del reconocido investigador Martín Almagro-Gorbea, editado por el Instituto de Estudios Albacetenses (IEA) ‘Don Juan Manuel’ de la Diputación la Diputación de Albacete con la colaboración de la Universidad de Alicante.
El diputado provincial Francisco García Alcaraz participaba en dicha presentación, junto al director del IEA, Antonio Caulín Martínez; al alcalde de Chinchilla, Francisco Morote Alcaraz; al vicerrector de Investigación de la UA, Juan Mora Pastor; y al catedrático Alberto Lorrio Alvarado, director de la colección Studia Hispano-Phoenicia, que acoge esta edición.
La publicación es una obra de referencia en el ámbito de la arqueología protohistórica peninsular, que ha sido editada coincidiendo con el 50 aniversario del hallazgo del emblemático monumento ibérico de Pozo Moro, uno de los descubrimientos más relevantes de la Edad Antigua en la península Ibérica y el Mediterráneo occidental.
Obra coral que recupera y amplía el legado científico del monumento de Pozo Moro
Tal y como explicaba Francisco García, «Pozo Moro forma parte del alma arqueológica de esta provincia y es un símbolo de la riqueza patrimonial que atesoramos. Esta publicación es un homenaje a la ciencia, al rigor y al compromiso colectivo con la memoria de nuestros pueblos».
El libro ofrece una visión actualizada y profunda del monumento funerario del siglo VI a.C., integrando múltiples estudios realizados en las últimas décadas y recogiendo aportaciones de diversos investigadores y restauradores. Estructurado en forma de ensayos autónomos, muchos de los cuales fueron publicados previamente en artículos especializados, este volumen constituye una obra de conjunto y de madurez científica.
Proyecto alentado por Rubí Sanz, figura clave de la arqueología
El diputado destacaba también que esta obra ha nacido del impulso final de Rubí Sanz Gamo, fallecida este año, que ha sido una de las figuras más influyentes en la historia del IEA y referente nacional en el ámbito de la arqueología y la museología.
«Rubí, como una de las impulsoras del IEA, pero también como directora del Museo de Albacete y del Museo Arqueológico Nacional, fue guía, maestra e inspiración para generaciones. Esta obra responde a una última voluntad suya, expresada en la reunión que se mantenía la pasada primavera. Por tanto, también es un tributo a su legado irrepetible», señalaba García.
El objetivo es que esta obra, además de presentarse en Chinchilla —lugar de origen del hallazgo—, tenga continuidad en actos posteriores en la Universidad de Alicante y, si es posible, en el Museo Arqueológico Nacional, institución que dirigió la propia Rubí Sanz.
