Redacción
El cobrizo de las montañas del Alto Atlas se funde con los muros de Kasbah Tamadot. Con un gusto exquisito, el espíritu tradicional marroquí se refleja en cada detalle, los bellos patios interiores, los mágicos jardines con árboles frutales que nos trasladan a escenarios propios de ¨Las mil y una noche¨, mientras que en el interior el diseño sorprende con la abundancia de elementos contemporáneos.
Este sereno refugio que se rodea de un exótico paisaje, invita a la aventura. Fue comprado en 1998 por Sir Richard Branson, quien lo descubrió en uno de sus famosos viajes en globo. Hoy forma parte de la prestigiosa Virgin Limited edition.
Desde la colina del Atlas, en la ciudad de Asni y apenas a 45 minutos de Marrakech, Kasbah Tamadot tiene en sus piscinas, en el Hamman y en su delicioso restaurante todo lo necesario para sumergirnos en otro mundo. Para ampliar esta sensación atemporal conviene no perder la oportunidad de disfrutar de la naturaleza salvaje que le rodea y acercarse a algunos de los tradicionales pueblos bereberes que se funden con el paisaje y que completarán la mágica experiencia.