Redacción
El Camino de Santiago o Ruta Jacobea fue declarado Primer Itinerario Europeo de Interés Cultural por el Consejo de Europa en 1987, también se le ha otorgado el distintivo de Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco. La ruta santiaguista por excelencia es el Camino Francés, el más conocido, transitado y mejor condicionado de todos. Tiene su comienzo en Roncesvalles y una longitud de 750 kilómetros hasta llegar a Santiago de Compostela.
A lo largo de la ruta se presentarán un gran número de paisajes naturales espectaculares, donde la naturaleza se fusionará con el caminante, también se podrá aprender la historia y cultura de cada lugar por el que se vaya pasando.
A la hora de realizar una ruta del Camino de Santiago se puede optar por planificar nuestra propia ruta o hacer el recorrido organizado por una agencia. Ambos opciones son buenas y dependerá de los gustos de cada uno, pero hay pueblos y escenarios que no conviene perderse, estos son los siguientes:
Jaca destaca por su proximidad con el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, un paraíso para los amantes de la naturaleza en estado puro, así como de los deportes de invierno como el esquí. Además, este pueblo cuenta con un gran patrimonio histórico, como la Ciudadela, que ha sido declarada Monumento Nacional.
Uno de los pueblos con mayor tradición histórica navarra es el Puente La Reina, lugar donde se juntan el Camino Aragonés y el Navarro. Su puente medieval de piedra sobre el río Arga es uno de sus rasgos característicos, puente por el que pasan los peregrinos de una y otra ruta, y que antiguamente estaba protegido por dos torres, donde los peregrinos debían abonar una tasa de peaje. Otros monumentos que protagonizan este pintoresco pueblo son la Iglesia del Crucifijo y la Calle Mayor. Otros dos lugares destacados en Navarra son Estella y Sanüesa. El primero, situado en las orillas del río Ega cuenta con un barrio declarado Monumento Nacional, el barrio de San Pedro de la Rúa. Otros imprescindibles del mismo son la Iglesia de San Pedro, la Casa de los Duques de Granada de Ega y la Iglesia de San Miguel. El segundo, sobre el río Aragón, cuenta con un rico patrimonio histórico-artístico, entre los que destacan el Palacio Real, la Iglesia de Santiago El Mayor y la Iglesia de Santa María.
Dividido en dos partes por el río Najerilla está Nájera, un precioso pueblo en el que sobre todo destaca el Monasterio de Santa María la Real, construido por orden del rey Don García y destinado a panteón real desde su construcción.
Pasando a tierras castellanoleonesas, sorprende Carrión de los Condes, en Palencia. Se encuentra a casi 40 kilómetros de Palencia, es la capital histórica de la Comarca Tierra de Campos y una de las paradas fundamentales de la Ruta del Románico Palentino. No hay que dejar de contemplar el Pórtico de la Iglesia de Santiago, el Monasterio de Santa Clara del siglo XIII y la Iglesia de Santa María del Camino de las Victorias.
En León destaca Astorga, ciudad donde se pueden admirar obras de Antonio Gaudí, como el Palacio Episcopal, con su salón del trono, sus hermosas vidrieras neogóticas, el comedor de gala y la capilla que no dejarán a nadie indiferente. También hay que disfrutar en Astorga de la Catedral y del cocido maragato, así como de Castrillo de Polvazares, un pueblo situado a 5 kilómetros que es el bello ejemplo de la arquitectura popular.
Uno de los pueblos más bonitos de León es Villafranca del Bierzo, entre los ríos de Valcárcel y Burbia. Su calle del Agua está llena de palacios y casas solariegas y su castillo del siglo XVI conforman su oferta monumental de gran belleza. En la Iglesia románica de Santiago los peregrinos que no puedan seguir el camino ganan el jubileo en la Puerta del Perdón.
Finalmente, ya en tierras gallegas, no hay que dejar de admirar O Cebreiro, una pequeña aldea rodeada de impresionantes macizos montañosos. Se encuentra en la Reserva Nacional de los Ancares y la sierra de Caurel, de ahí su gran potencial paisajístico.
Otros caminos hasta llegar a Santiago son el Camino de Levante, el Camino del Cantábrico, el Camino Asturiano, la Vía de la Plata y el Camino Portugués.