Texto: Paula Chirigu
Si bien nuestros cuerpos, gustos e intereses y personalidades son diferentes en cada persona, nuestros cerebros también lo son. Cada uno de nosotros piensa de formas distintas y actuamos según veamos conveniente. Pero, al final del día, la gran mayoría de la población se constituye con lo que llamaríamos un cerebro neurotípico o “normal”. Sin embargo, siendo las 7.8 billones de personas que vivimos actualmente en el mundo, parte la naturaleza de que no todos los seres humanos funcionan de la misma manera. Por ello, existe un término denominado neurodiversidad (neurodivergent en inglés) que clasifica a todos aquellos individuos con un cerebro atípico (que “no es normal”).
¿Qué es la neurodiversidad?
La neurodiversidad es un término que engloba a todos aquellas personas neurodivergentes. Estos individuos viven su vida diaria con un cerebro que funciona, procesa y aprende la información de distinta manera de las personas neurotípicas. Este término fue creado en los años 90 por activistas como Jim Sinclair, Kathy Lissner y Donna Williams para erradicar la connotación negativa del Autismo como una enfermedad. Las personas neurodiversas sufren, en cambio, un estilo diferente de procesamiento cognitivo que hace que se diferencie de lo que sería una enfermedad, pues dicha palabra suele significar algo doloroso que altera la función del organismo interior o exteriormente, o una discapacidad. Aun así, esto no quiere decir que todas las personas neurodiversas experimenten las mismas condiciones o características, pues tenemos varias categorías que los clasifican según la funcionalidad de su cerebro.
Tipos de neurodiversidad
Algunos tipos que podemos encontrar son:
TDA/TDAH
El TDA o TDAH, denominado como el trastorno por déficit de atención e hiperactividad, es una manifestación de dificultades para mantener la atención, controlar los impulsos, la necesidad de acción y la hiperactividad.
Hay tres tipos: el inatento, el hiperactivo/impulsivo y el combinado.
Actualmente hay un total de 84.71 millones de personas en el mundo con esta neurodiversidad.
DISCALCULIA
Es la dificultad del aprendizaje, comprensión y resolución de las matemáticas.
Se piensa que esta neurodiversidad afecta a un total del 7% de la población mundial.
DISLEXIA
La dislexia supone una alteración en la lectura suponiendo una dificultad surgiendo a partir de problemas para identificar sonidos del habla y comprender cómo se relacionarían las palabras y las letras.
Se piensa que en el mundo podría haber un total de 780 millones de personas disléxicas, aunque, dado a que mucha gente no es conocedor de poder serlo, se estima que de un 9% a un 12% estaría afectado y tan solo un 2-4% estarían gravemente afectados.
AUTISMO
También conocido como el trastorno del espectro autista. Afecta al desarrollo del celebro de tal forma que causa una afección en la forma en la que percibe y se socializa con las personas causando problemas en la interacción social y comunicación.
Un total de alrededor de 31.18 millones de personas en el mundo son autistas.
La neurodiversidad en el ámbito educacional
7 de cada de 10 personas en el mundo son neurodivergentes. Sin embargo, incluso con este significativo dato, el ámbito educacional parece seguir siendo diseñado únicamente para los individuos neurotípicos, dejando de lado a los atípicos. La idea de neurodiversidad se ha usado, y se usa, para crear un entendimiento de que estos individuos no son alumnos con problemas de aprendizaje ni sufren de un déficit, pues indica más el hecho de ser seres con una necesidad de aprendizaje distinta al resto de alumnos. Existen unas estrategias establecidas por expertos que ayudan a los profesores descubrir cómo realizar unas tácticas para fomentar la inclusión de las personas neurodivergentes en clase.
Algunos serían:
Ser conocedores de las fortalezas de los alumnos neurotípicos y crear estrategias a base de estas. Saber qué apasiona a estos alumnos hace más fácil conectar y potenciar el aprendizaje de estos estudiantes.
El uso de ciertas tecnologías, como libros digitales con gráficos y audios, facilitan el procesamiento de la información escrita.
Una creación de un diseño universal para el aprendizaje. De esta forma, un uso de un sistema que ayude y facilite el aprendizaje de los neurodivergentes no solo beneficiaría a estos alumnos, si no la de los neurotípicos también.
La modificación ambiental del entorno puede crear un catalizador para un estado óptimo en el estudiante neurodivergente.
Cambiar el pensamiento de que las diferencias de estos alumnos son déficits, pues crea un estigma a la hora de interactuar y enseñar.
Aceptar la neurodiversidad en las aulas, ya que es un concepto muy valioso que permite la aceptación de que no todos los alumnos son iguales ni aprenden igual, ayudando a trabajar con esta diversidad.
Adaptación de los trabajos a intereses especiales de los alumnos para cautivar la atención de dichos alumnos y fomentar el aprendizaje.
Presentar instrucciones verbales escritas, pues muchos de los alumnos neurodivergentes pueden presentar dificultades a la hora de comprender instrucciones habladas.
Hay que tener en cuenta que, para este tipo de alumnos no neurotípicos, las escuelas, institutos y universidades pueden ser un infierno sensorial.
De esta manera, existe una necesidad de reformar y adaptar el sistema educativo de “modelo de fábrica” para acoger a todos los alumnos que presentan dificultades, pues la neurodiversidad exige una flexibilidad que actualmente puede llegar a ser inexistente.
Hoy en día, existen regulaciones que ayudan a adaptar a los alumnos en sus ámbitos educacionales, como por ejemplo permitir más tiempo de entrega para alumnos con TDAH.
No obstante, sigue haciendo falta por parte de los docentes en las aulas, y en las instituciones, de crear una inclusión a estos alumnos, en vez de una integración.
