jueves, abril 25, 2024

Román Rymar: “Cuando ves tu nombre en la puerta de un camerino es cuando piensas que si has llegado hasta ahí tienes que disfrutarlo”

Texto: C.A. y S.C. / Fotos: R.R.

Román Rymar tiene 26 años, nació en Ucrania, pero se vino a España cuando era muy pequeño. Le hemos visto en la cuarta temporada de “La Casa de Papel” interpretando al polaco Borish, pero ha participado también en “Orígenes Secretos”, “@buelos” o “Hacerse mayor y otros problemas”. Toda su carrera comenzó cuando, lejos de nacer en una familia de artistas, se propuso a él mismo ser actor y así lo hizo, dejando atrás su sueño de ser policía. Aunque al principio fue difícil, poco a poco fue conociendo el mundo cinematográfico y abriéndose camino hasta llegar a aparecer en la gran plataforma de Netflix. También ha trabajado en teatro y microteatro, pero siempre ha preferido los rodajes a los escenarios. Hoy hablamos con él para que nos cuente su trayectoria profesional, sus gustos y algunas cosas sobre su vida, todo desde el buen humor que le caracteriza.

Román nació en Ucrania, pero llegó a España con solo cuatro años, ahora tiene veintiséis. En la práctica se considera español aunque confiesa que guarda un As en la manga para en algún momento contar que es ucraniano, “más que nada para tener tema de conversación, un poco cutre, pero siempre puedo salir con eso”, confiesa el actor.

¿Por qué decides ser actor?

Lo suyo sería decirte que fue una historia de autosuperación, pero la verdad es que no pasó así. Fue durante esa época rara que tenemos todos, entre la adolescencia y el ser adulto, cuando no sabes qué hacer con tu vida. De repente me empezó a interesar el mundo de la interpretación y pensé que yo podría hacerlo. Al principio fue más difícil de lo que pensaba, me di cuenta de que no era tan sencillo, pero poco a poco fui cogiendo experiencia. Pero fue eso, una decisión de pensar “¿a qué quiero dedicarme?” y empezar a buscar.

¿Hay alguien en tu familia que se dedique a esto?

No, nadie. Mi madre es chef y mi padre conductor, y ni siquiera en mi familia lejana hay algún actor o actriz, pero es que ni de cerca. Nada de nada. Yo le dije a mis padres que me gustaba este mundo y no fue el típico cliché de película en el que los padres se oponen, si no que me dijeron: “adelante, mientras te dé para vivir”.

¿Si no hubieras sido actor, a qué te hubieras dedicado?

Antes de decidir ser actor, cuando era adolescente, estuve muchos años haciendo distintos deportes, entre ellos el fútbol americano porque quería ponerme en forma para ser policía, hasta que de repente de un día para otro se me metió esto en la cabeza. Fue un cambio un poco “loco”.

Has hecho televisión, algo de cine, publicidad y microteatro, ¿alguno que eprefieras?

Diferenciando lo que es el teatro de lo audiovisual, me siento mucho más cómodo en el mundo audiovisual, claramente. Me gusta mucho más tener una cámara delante, no sé por qué; el teatro me gusta, pero no tengo esa comodidad. Entre cine y televisión no puedo elegir, porque en cuanto a forma de trabajar no se diferencia mucho.

Has estado en la 4ª y 5ª temporada de la Casa de Papel, ¿qué ha significado para ti esa serie y tu papel?

La cuarta temporada no significó mucho porque era un papel muy pequeñito, estuve apenas dos semanas, aunque sí que es cierto que fue mi primer acercamiento a un proyecto tan grande. Fui varios días seguidos, vi el ambiente, las distintas unidades que hay, tuve la oportunidad de estar con otros actores que llevan proyectos bastantes grandes a la vez. Poco a poco fue esto lo que me abrió los ojos y me permitió darme cuenta de que no son todo “capitulares”, sino que hay un mundo que exige más constancia de la que parece. En la quinta temporada, aunque no era uno de los personajes principales, ya tuve un personaje más sólido. Como experiencia fue muy divertido porque ya empiezas a conocer un poco la regularidad y, bueno, tienes un camerino con tu nombre. De hecho, el primer día mi nombre estaba mal escrito, como siempre me pasa y mira que mi nombre es sencillo. Me han llegado a poner Germán en el cartelito. Pero bueno,cuando ves tu nombre en la puerta de un camerino, es cuando piensas que si has llegado hasta ahí tienes que disfrutarlo, me da igual la etiqueta de la puerta”.

Román en la puerta de su camerino durante una grabación.

¿Con qué director te gustaría trabajar y qué papel te gustaría interpretar?

Me gustaría mucho trabajar con Alex de la Iglesia, le llevo persiguiendo durante toda mi carrera y quiero poder lograrlo antes de que se retire. En cuanto al papel, ahora estoy en un perfil en el que, al ser físicamente grande y extranjero, me dan papeles de extranjero, el tío malo o el friki. A mí me gustaría hacer un papel más neutral, con más diálogo, como el personaje del “profesor” en “La Casa de Papel”.

No tienes nada de acento, ¿cómo lo haces cuando tienes que interpretar papeles de extranjero?

La verdad es que falseo el acento, no lo tengo nativo, soy como un “español haciendo acento del este”. Sí que tengo la ventaja de saber los trucos de pronunciación de las palabras, como por ejemplo el ruso: las aspiraciones, etc. Sin embargo, lo que es el acento en sí que se busca en España, que es hablar con muchas “erres”, lo tengo que falsear porque no es el acento real, sino que es, por decirlo de alguna manera, lo que pide el mercado.

He estado viendo tus redes sociales, bueno, Twitter, eres un poco peleón ¿no?

Siempre hay que tener cuidado porque no sabes a quién le puedes contestar, porque igual te das cuenta de que a esa persona le gusta un director o un productor… Hay que andarse con pies de plomo. Además, hoy en día no está la cosa como para ir provocando mucho. Me gusta ser un poquito picky, pero sin pasarse, con mi nombre real tampoco puedo jugármela. Sí que es verdad que, muchas veces, aunque des tu opinión desde el respeto, a la gente en las redes sociales no les gusta que no pienses igual que ella. Comentas sobre una película, sobre política o cualquier cosa y ya te llaman hater. Es verdad que a veces respondo para ver si pico a alguien, pero siempre desde el humor.

El actor disfruta igual haciendo cine que televisión.

¿En qué proyectos estas trabajando ahora?

Estoy grabando una serie que se llama “García para HBO, que es la adaptación de una novela y hago de ruso otra vez, que raro. Lo que me mola de este capítulo es que es de los pocos que me han dado en una serie de estudio, no es solo presencia y diálogo, sino que también tengo una escena de acción para la que he tenido que estar varios días yendo a practicar y por eso me ha gustado tanto la experiencia. Aún me faltan un par de sesiones para practicar. Además, creo que siempre es bonito el proceso, el hacer las secuencias, cambiarlas junto al director y el productor para saber cómo quedan mejor, etc. Es bonito desde el principio hasta el final. Lo único que no me ha gustado es que era un rodaje en una nave semiabierta, ahora en verano, a cuarenta grados, en una furgoneta real que era como un horno. Estoy rodando otra cosa aparte, pero de la que aún no puedo hablar.

¿Algún proyecto futuro del que si nos puedas hablar?

Tengo pendiente un cortometraje en septiembre y me han llamado para hacer algunas pruebas, pero por ahora no ha llegado. Eso sí, tengo muchas ganas de que salga la quinta temporada de la “Casa de Papel” porque ahí ya tengo un papel más grande y estoy esperando a ver si no me han cortado como pasó en la cuarta, que al final me quedé con una frase y tres secuencias, cuando grabé mucho más.

Artículos relacionados

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

logo-diario-mas-noticias
Recibe las  últimas noticias

Suscríbete a nuestra newsletter semanal