Texto y fotos: Ricardo Soto Molina. Licenciado en Ciencias Biológicas. Profesor de Estado en Biología, Química y Ciencias Naturales.
Ubicadas al sureste de Madrid, de origen artificial y de ecosistema humedal, Las lagunas de Velilla de San Antonio son una excelente alternativa para los que quieran comenzar una actividad física al aire libre, con la posibilidad de descubrir interesantes especies que componen la flora y fauna, tanto local como alóctona de España
El origen de estas lagunas se remonta al año 1991, creadas a partir de labores de extracción de áridos, cuyas concavidades fueron llenadas por los cauces de los ríos aledaños. Debido a su gran relevancia ecológica, se realizaron trabajos de restauración durante el 2007, modificando la morfología de sus orillas para favorecer la biodiversidad de especies tanto animales como vegetales, por lo que hoy contamos con estas hermosas vistas, para el disfrute de excursionistas, pescadores y entusiastas de la naturaleza.
Con senderos delimitados y con una duración aproximada de una hora y media, es posible recorrer uno de sus lagos principales, con la grata posibilidad de observar una gran cantidad de aves, entre ellas: Agachadiza común (Gallinago gallinago); ánade azulón (Anas platyrhynchos); avefría europea (Vanellus vanellus); avión zapador (Riparia riparia); cigüeñuela común (Himantopus himantopus); cuchara común (Anas clypeata); focha común (Fulica atra); gallineta común (Gallinula chloropus) y muchas más.
Las lagunas son alimentadas por los afluentes del río Jarama, poseen un color verde y una gran cantidad de algas, en sus orillas es común encontrar Carrizos (Phragmites australis), Espadañas (Typha domingensis) y Regaliz (Glycyrrhiza glabra). También existe la presencia de una especie introducida conocida como Ailanto o árbol de los dioses, especie de origen chino muy utilizado en la ornamentación de plazas y jardines en toda Europa. Si lo suyo es la pesca, puede encontrar al Carpín (Carassius auratus), entre otras especies de peces en sus verdes aguas.
Durante el día es posible observar anfibios y reptiles, los que buscan el calor del sol para regular su temperatura. Los más comunes de ver son la Rana verde común (Pelophylax perezi) y la Galápago leproso (Mauremys leprosa) especies propias de España, las que han tenido que competir por espacio y alimento con la tortuga Galápago de Florida (Trachemys scripta) especie introducida invasora.
¡Cuidado al caminar entre los senderos! En esta época puedes encontrar a la oruga de la polilla gigante del pavo real, un invertebrado asombroso: de vivos colores, de al menos 10 centímetros de largo, de color amarillo y crestas verdes. Sobrevolando la superficie del agua y entre la vegetación, podemos encontrar a diversas especies de libélulas y caballitos del diablo (Odonata), entre las que se destacan: Anax imperator, Crocothemis erythraea, Enallagma cyathigerum, Ischnura elegans, Orthetrum brunneum, Platycnemis latipes, Sympecma fusca, Sympetrum fonscolombii, entre otros. Las lagunas cuentan con una gran diversidad de invertebrados, debido a las favorables características de humedad, temperatura y flora, tanto acuática como terrestre.
Debido al comercio como mascota y la irresponsabilidad de sus dueños, podemos tropezarnos con el Mapache boreal (Procyon lotor), mamífero invasor de hábitos nocturnos, omnívoro, muy activo y agresivo con la fauna local, por su naturaleza oportunista ataca nido de diversas aves, poniendo en peligro el estado de conversación de estas. “Esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, regulado por el Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, estando prohibida en España su introducción en el medio natural, posesión, transporte, tráfico y comercio” (BOE, 2013).
La calidad de sus aguas está valorada como mala y no es apta para el consumo humano, posee altas concentraciones fosfatos y nitratos, los que favorecen el proceso de eutrofización: Contaminación de ecosistemas acuáticos debido a la alta presencia de nutrientes inorgánicos que favorece el crecimiento descontrolado de algas microscópicas(fitoplancton) que reducen la cantidad de oxígeno disuelto en el agua y pone en peligro la continuidad de diversas especies de animales acuáticos. Las lagunas de velilla son una excelente alternativa para excursionistas iniciales que desean empezar a realizar este tipo de exploración, donde podrán descubrir parte de la flora y fauna española, además de encontrar especies alóctonas. Es de suma importancia recordar que debemos comprometernos con la tenencia responsable de nuestras mascotas, no traer especies silvestres a nuestros hogares y de no dejar basura que atente contra la estética y la salud de estos humedales.
