Redacción
España cuenta con 15 Parques Nacionales, además de otro gran número de Parques Naturales y espacios de alto valor natural y cultural protegidos que se conforman como un lugar de respiro de la civilización. Son muchas las personas que de vez en cuando necesitan de una escapada a lo profundo de la naturaleza, dejando durante unos días el asfalto y el bullicio característico de la ciudad. Caminar entre la sombra de los árboles, observando y escuchando la vida animal en pleno esplendor y olvidando los problemas del día a día se puede hacer realidad en los numerosos remansos naturales que se encuentran a lo largo del territorio español. Los mejores lugares para evadirse y adentrarse en la naturaleza en España pueden ser los siguientes espacios protegidos:
Tablas de Daimiel, Ciudad Real
Situado en pleno centro de La Mancha, es el último ejemplo de un ecosistema de tablas fluviales, fruto del desbordamiento de los ríos Guadiana y Gigüela al confluir. Entre sus aguas se encuentra una gran variedad de fauna, como las garzas imperiales, las cigüeñelas reales, patos cuchara o nutrias. La zona se puede recorrer por libre o de forma guiada, tanto a pie como en coche todoterreno.
Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, Lleida
Está situado al norte de la provincia de Lleida y se caracteriza por estar dotado de un gran número de lagos, más de 200, entre los que destaca Sant Maurici, de origen glaciar y situado a 1.900 metros de altitud. En este parque, además de lagos, se encuentran importantes riscos, conocidos como Els Encantats, que crean unos escenarios naturales de lo más hermosos. Para los más experimentados, se encuentra la ruta Carros de Foc, que conecta todos los refugios de montaña de la zona.
Archipiélago de Cabrera, Palma de Mallorca
Este archipiélago se encuentra al sur de la isla balear de Mallorca y está formado por una isla principal, Cabrera Gran y hasta 18 pequeños islotes. Es uno de los mejores ejemplos de un ecosistema insular no alterado por la actividad del hombre y en él se pueden encontrar colonias de aves marinas, especies endémicas y uno de los mejores fondos marinos del litoral español. Sus acantilados, calas, cuevas y playas de arena blanca crean un escenario perfecto para disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad.
Islas Atlánticas de Galicia
Estas islas se encadenan desde la ría de Arousa hasta la de Vigo y forman un paisaje atlántico caracterizado por los vertiginosos acantilados. Este paraje único está dotado de matorrales, dunas, playas y fondos marinos de una riqueza excepcional, en los que se encuentran los cañones de los antiguos buques hundidos en la zona. Las Islas Cíes son las más conocidas de este enclave natural, un oasis de naturaleza en el que se encuentran fabulosas playas como la de Rodas.
Picos de Europa, Cantabria, Asturias y León
Este Parque Nacional se encuentra en la Cordillera Cantábrica, extendiéndose en el territorio de las provincias de Asturias, León y Cantabria. Es uno de los máximos representantes del bosque atlántico, con paisajes moldeados por la erosión glaciar y donde la presencia de lagos es muy abundante. Destacan los lagos de Covadonga, donde se sitúa el santuario del mismo nombre, también otros lugares como el desfiladero del Cares, conocido popularmente como Garganta Divina, o el impresionante Naranjo del Bulnes, con un pico que sobrepasa los 2.500 metros de altura. La fauna de la zona es especialmente rica, entre los que resaltan los corzos, los lobos o el oso pardo.
Garajonay, La Gomera
En las Islas Canarias se encuentran cuatro importantes Parques Nacionales: La Caldera de Taburiente en La Palma, de las Cañadas del Teide en Tenerife, el de Timanfaya en Lanzarote y el de Garajonay, pero este de la Gomera destaca por su singularidad. Su ecosistema es conocido como laurisilva y tiene un gran valor ecológico. Caminar por este paraje, entre valles llenos de bosques con unos tonos verdes casi fluorescentes que se mezclan con los salientes de roca, denominados Roques. Este paraje está caracterizado por la niebla procedente del Océano Atlántico, que cae sobre la vegetación y la dota de una humedad característica.
Hay que recordar que son espacios naturales protegidos y por ello se debe respetar por completo cada elemento del ecosistema y dejar los lugares como se han encontrado. Cada vez son más los ecosistemas que acaban destruidos y afectados por la actividad del hombre, por eso hay que tener conciencia y no olvidarse de proteger la naturaleza.