Redacción/ Fotos: Pol Rebaque
Oriol Pla nace en Barcelona en el seno de una familia de artistas. Hijo de un actor y una violinista, se cría entre bambalinas y lleva sobre los escenarios toda una vida. Considerado uno de los mejores actores de su generación, su irrupción en la gran pantalla se produjo en 2012 con el film Animals, de Marcel Forés. Ganó el Premio Gaudí a Mejor Actor Secundario en 2018 y 2019 por sus interpretaciones en Incerta glòria de Agustí Villaronga y Petra de Jaime Rosales y en la pequeña pantalla protagonizó la aclamada serie El día de mañana de Mariano Barroso. Pese a su éxito en el cine y la televisión, Oriol no ha dejado de lado su pasión por el teatro, y actualmente está llevando de gira por toda Europa con la compañía circo contemporáneo Baró d’Evel. Últimamente, tiene pendiente de estreno la serie La Ruta de Borja Soler.
Nos encontramos con uno de los referentes del panorama actoral nacional, un humanista del Siglo XXI, el actor Oriol Pla, que estrena el próximo 14 de octubre Girasoles silvestres bajo batuta del director Jaime Rosales. Pero antes ha estado presente en el Festival de cine de San Sebastián.
Girasoles silvestres, una historia de amor y superación que protagonizada junto con la actriz Anna Castillo. ¿Qué nos puede contar sobre ella?
Que estoy muy orgulloso del trabajo que hemos hecho. Que es una película rodada con mucha sensibilidad, crudeza y humanidad. Pese a los pasajes más oscuros, es una historia que avanza hacia la luz y el optimismo. El personaje de Julia , lleno de ilusión, busca la mejor vida posible para ella y para sus hijos, sorteando, como puede, masculinidades tóxicas y realidades precarias. Es una película que habla de los vínculos familiares, de la necesidad del clan, de la masculinidad, la maternidad y del amor en sus múltiples caras, fases e intensidades.
¿Qué le gustaría que ocurriera con Girasoles silvestres?
Deseo que la película llegue a mucha gente. Es una pieza muy honesta y bella, creo que puede tocar la intimidad de muchas personas. A mí me conecta mucho con la crianza de los hijos. Espero que la gente vaya al cine, viaje y se emocione y le dure semanas.
Da vida a Oscar, el romance “intenso y tortuoso” de Julia
Óscar es una persona muy herida y muy asustada que ha aprendido que el dolor y la vulnerabilidad no tienen espacio en su mundo. Una persona llena de vida, que no se lanza de cabeza a perseguir lo que desea, que no espera a que la vida le regale nada ni le dé permiso. Con muchas ganas de amar, de que le amen y de ser feliz. Alguien desenraizado que necesita un vínculo familiar desesperadamente. Una persona llena de ira a la merced de sus debilidades. Se enamora perdidamente de Julia.
¿Qué hay de Óscar en Oriol y de Oriol en Óscar?
En el acercamiento al trabajo, una frase rezaba por encima de mi cabeza y la de Jaime: “Nada de lo humano me es ajeno” una afirmación que utilizamos a nuestro favor para animarnos a buscar dentro de nosotros lo totalmente desconocido e incluso temido. Así que lo que puedo decir es que Oriol y Óscar no se conocían. En absoluto. Uno le tenía miedo y el otro le aborrecía. Aún así, les gustaba reír y bailar. Fue un proceso muy largo, muy complejo y muy temerario para mí, para Jaime también. Era algo que ninguno de los dos había hecho nunca.
¿Qué ha supuesto para usted rodar esta cinta?
Ha sido un viajazo. Ha sido un aprendizaje radical en la forma que tengo de acercarme a la creación del personaje y al juego. Ha sido un placer trabajar con un equipo tan bueno y de una forma tan única. Ha sido un proceso, como decía, largo y duro, pero también lleno de euforia, generosidad y equipo.
¿Cómo ha sido rodar bajo la batuta de Jaime Rosales?
Es la segunda vez que ruedo con Jaime. Solo diré que volvería una y otra vez. Que es muy inspirador y que es un regalo cómo actor jugar con él. Lo que recibo de él es siempre una rigurosa libertad.
Proyectos futuros y confesables.
Sigo de gira con la compañía de circo contemporáneo Baró d’Evel estaremos en los Teatros del Canal el 10, 11 y 12 de noviembre con Falaise. También continuo con la gira de Travy, un espectáculo que he coescrito y dirigido. Explica la historia de las familias de artistas, en concreto la mía y el cambio generacional desde los 70-80 a la actualidad. Estaremos de temporada en la Sala Beckett de Barcelona en diciembre de este año. En este momento estoy rodando la película Creatura bajo las órdenes de Elena Martín.
CONSULTORIO CINEMATOGRÁFICO
¿Qué película le recetaría a una persona que sufre de ansiedad?
Monthy Python, Charles Chaplin, Hermanos Marx… El humor absurdo creo que es un bálsamo para el alma y un repelente de las preocupaciones.
¿Le recetaría Girasoles Silvestres a sus mejores amigos?
Por supuesto. Les gusta mucho reírse de mí y eso no me lo quiero perder.
¿Y un título para quien sufre de nostalgia?
Big Fish me genera mucha nostalgia. Esos mundos que nos contaban nuestros padres y que vivíamos profundamente. Ver el mundo infantil con ojos de adulto me genera un dulce dolor.
Una peli a la que recurra cuando quiere levantar el ánimo
Blues Brothers. Maravilla. Especialmente Aretha Franklin en delantal.
¿Y otra para cuando quiere olvidarse del mundo?
2001: A Space Odissey.
¿Si tuviéramos que conocerle por una peli, cuál le definiría?
¿Ahora mismo? Holly Motors. Porque me lo paso genial viéndola, me llena de curiosidad y terror y cuándo llega el final me parto de risa porque no entiendo nada.
