viernes, abril 26, 2024

Afeitarse: curar un corte sin ponerse un trozo de kleenex

Redacción

¿Quién no habrá visto un compañero de trabajo, un vecino o un familiar aparecer con un trocito de kleenex en la mejilla y que nos provoque una sonrisa discreta? Evidentemente todos sabemos a qué se debe y es que estos pequeños accidentes matinales ocurren todos los días, hasta a los más profesionales. Un pequeño corte con la cuchilla puede ser debido a muchas razones; demasiadas prisas por la mañana, demasiada o no la suficiente mousse para el afeitado, pasar por encima de un lunar o sobre un pelo encarnado. Bueno, sea lo que sea este corte, no es peligroso, pero solo quedan unos pocos minutos para estar presentables.

Sin ofensa porque lo que os voy a decir seguro que ya lo habéis intentado, bueno vosotros y todos. Ponerse un trozo de kleenex, de papel higiénico o de cocina sobre la herida para cortar la sangre no es el único modo. Os compartimos algunas técnicas para cuidar esos cortes.

Coger un paño limpio y pasarlo por agua caliente. Hay que ponerlo encima de la herida unos 30 segundos. El agua caliente tiene la doble función, por una parte limpiar el corte y por otra ayudará a ralentizar el sangrado.

Aplicarse un aftershave que no sea a base de alcohol para desinfectar la herida. Podemos pensar que el alcohol es la solución ideal para desinfectar, sin embargo, este es demasiado agresivo. En vez de ayudar a cicatrizar lo único que va a provocar es secar la piel e irritarla. Existe un aftershave a base de agua de hamamelis que además de neutralizar las bacterias también aliviará la piel.

Mantener un trozo de hielo unos 15 a 30 segundos para cortar el flujo sanguíneo. Esta técnica debería cortar completamente la sangre. El frío cierra los poros.

Ponerse un bálsamo sin perfume sobre el corte. Este actuará como cicatrizante e impedirá a los gérmenes entrar en el cuerpo. Utilizando un bálsamo en tubo habrá menos posibilidades de que el producto haya sido expuesto al aire o a las baterías. También existen las pomadas en forma de tubo, como la vaselina para los labios. Tiene la misma utilidad, sin embargo habría que quitar la parte que se haya pasado sobre los labios para evitar todo tipo de contagio. A la hora de aplicar la pomada hay que hacerlo con cuidado y con los dedos. No pasa nada en dejar un pequeño pegote si hay tiempo. Pero si es el momento de salir de casa, no pasa nada por poner un poco menos teniendo siempre en cuenta que la herida se está cerrando. Se puede utilizar también una crema antibiótica como Mupirocina para un 3×1, cicatrizar, desinfectar y cerrar el corte.

No tocar la herida durante 30 minutos. Después de haber aplicado el bálsamo, esperamos media hora y quitamos el excedente con las manos limpias. La herida debe de haber dejado de sangrar y el poco de crema que queda dentro de ella ayudará a nutrir el corte.

Un poco más de bálsamo. Al final del día no hay que dudar en volver a poner un poco más de crema después de haberse lavado la cara. De tal manera se acelerará la cicatrización e impedirá que entren bacterias.

Por la noche se puede volver a aplicar antes del bálsamo el agua de hamamelis.

Ya tenéis un sustito al trocito de papel. No solo son trucos que desinfectan sino que además de evitar hacer el ridículo, también se evitan las infecciones y todo tipo de cicatrices. Ahora seréis vosotros los que os reiréis de los que se han pegado confetis sobre la cara.

Artículos relacionados

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

logo-diario-mas-noticias
Recibe las  últimas noticias

Suscríbete a nuestra newsletter semanal