Texto: Sandra Cuenca/ Fotos: B.C.
Bárbara Caffarel es actriz y periodista. Desde hace diez años dirige junto a Gorka Castaño la agencia de comunicación y productora Mi Trampolín Comunicación. Ha trabajado en televisión, cine y teatro, tres pasiones que compagina con mucha ilusión. La hemos visto en la obra «La Casa de Bernarda Alba«, en el largometraje «Tristesse» o «Tentaciones«, entre otras, y acaba de estrenar la película «El Hogar«, dirigida por Julio de la Fuente.
Cuando Bárbara acaba de estudiar Periodismo y Comunicación Audiovisual, se va a vivir a Holanda y después vuelve a España. Siempre había querido estudiar interpretación, pero recuerda lo típico que siempre se dice: «primero hay que estudiar una carrera y después ya estudias lo que te guste». Cuando ya estaba trabajando, es cuando por fin pudo pagarse los estudios de Arte Dramático, «digamos que desde siempre me ha gustado el teatro y me ha gustado interpretar, por lo que era algo que llevaba tiempo queriendo hacer, pero hasta que no terminé la carrera no pude hacerlo, no podía compatibilizarlo«, recuerda la actriz. Es a partir de los 26 años cuando puede empezar a formarse como actriz.
¿Cómo recuerdas aquellos comienzos?
Al principio era muy divertido, pero si que es verdad que meterme en el medio de una actuación, comprenderla y entrar en los personajes fue difícil, aprendí que es una profesión muy dura. Es como una carrera de fondo donde no dejas de aprender y de estudiar cada vez que interpretas un personaje o haces algún curso. Siempre he intentado aunar mis estudios de periodismo y comunicación audiovisual con los de arte dramático.
Has hecho televisión, cine y teatro, si tuvieras que quedarte con alguna ¿Cuál erigirías?
Me gusta el cine, porque también me gusta todo lo que hay detrás, y me gusta el teatro porque te permite estar al lado del público y porque sabes que ninguna función es igual a las otras, eso te llena muchísimo. Ahora voy a hacer una obra de teatro que estrenaremos en el Campo Amor de Oviedo y estoy deseándolo, ya que durante el doctorado lo tuve un poco abandonado.
Creas junto a Gorka Castaño Trampolín Comunicación ¿Cómo nace?
Acababa de hacer una película de cine independiente y mi compañero Gorka, al que en aquel momento no conocía, quería entrevistar al director de la película y le acompañé. Hablamos un poco de aquella película y nos hicimos amigos. Él tenía un blog de cine que se llamaba «Mi Trampolín» y a partir de ahí empezamos a hacer cosas juntos: reportajes, entrevistas a actores, video-books… él tenía cámara y yo algo de equipo. A partir de ahí empezamos a tener una relación bastante estrecha y de ahí nace Mi Trampolín Comunicación y Mi Trampolín Producción, que son dos empresas. Él es experto en marketing y yo había estudiado periodismo y comunicación, así que empezamos con el tema de redes sociales, páginas web, comunicación de empresas… ya llevamos 10 años juntos.
¿Hacéis cine y teatro en Mi Trampolín? ¿Producís?
Producimos siempre y cuando haya presupuesto, sobre todo lo que tratamos de hacer es producción de piezas audiovisuales que nos encajen. Si nos encarga un cliente que trabaja en la cirugía estética un anuncio, pues se lo hacemos. No todo es producción de cine. Salvo un cortometraje que estamos ahora produciendo porque ha habido un productor que está interesado y está intentando buscar financiación, pues eso sí, pero nosotros buscar la financiación para películas de cine no, porque ya lo he hecho y es bastante duro, me gusta vivir.
Das clases en la universidad, trabajas como actriz, trabajas en Trampolín Comunicación, presentas el programa «Con La Piel de Gallina» … ¿Cómo lo haces?
«Con la Piel de Gallina» lo estrenamos dentro de Trampolín Comunicación, es un programa de cultura que nos gusta y que lo hacemos por placer, porque nos gusta todo el tema de música, actuación, los artistas… y además mi compañero era cantante. Se nos ocurrió este formato que es muy divertido y lo hacemos para Déjate de Historias TV, de María José Peláez, que bueno, es un formato más.
¿Cómo lo hago? Pues no me clono ni tengo trillizas, la clave es administrarme bien el tiempo. Las clases en la universidad me las pongo los viernes o los jueves por la tarde y luego, los programas se graban varios de golpe. En las obras de teatro cuadro bien los ensayos… todo es organización. y luego otra cosa, me apasiona todo lo que hago, que eso es muy importante y no tengo un horario de oficina.
El programa de «Con La Piel de Gallina», he visto que lleváis a gente muy conocida, pero también lleváis a gente está debutando, ¿debería haber más plataformas que dieran a conocer a la gente que está empezando?
Por supuesto, creo que es muy importante que haya una plataforma para la gente que está empezando, pero también creo que es importante que esa persona tenga una historia que contar. Hay muchas veces que viene gente que te dice que está empezando, pero realmente no tiene una formación y al final, se te queda pobre la entrevista para poder desarrollar una historia. Creo que es muy importante, porque igual que me han dado oportunidades a mí, hay mucha gente muy valida que también las debería tener. Por eso creo que es necesario darles un impulso.
¿Qué te ha enseñado la profesión de actriz y la de periodista? ¿Te ha servido en tu día a día?
El periodismo me ha enseñado a conocer las historias que hay detrás de la gente, a saber sacar toda esa información importante que te da la oportunidad de conocer a esas personas. Cuando yo estudiaba periodismo sabía que no iba a ser periodista de «al filo de la noticia», me gustaba más el tema cultural y todo lo relacionado con él. En esta profesión de periodista en la que me he enfocado, o en la comunicación empresarial, que es lo que básicamente da de comer, he tenido la oportunidad de conocer a gente nueva, a artistas de reconocido prestigio que me han ido aportando mucho contenido de valor.
La profesión de actriz me ha permitido dejar a un lado mi timidez, aunque no lo parezca me considero una persona muy tímida, me costaba mucho hacer presentaciones en la universidad, pero en el momento que empecé el primer año de arte dramático se me quitaron todas las tonterías. Me permite desenvolverme muy bien ante la sociedad y ante cualquier situación.
¿Podemos decir que la carrera de periodismo te ha ayudado en tu faceta de actriz?
Durante la carrera me daba vergüenza ponerme delante de una cámara, en el momento que aprendí las pautas para actuar delante de una cámara, todo cambió, también me servía para los programas de televisión, al fin y al cabo, estoy haciendo un papel.
Presento dos tipos de programas, el de cultura y el que hacemos para una clínica de cirugía estética y programas de divulgación médica. Ahí hago otro tipo de personaje porque tengo que estar más seria. Hago dos tipos de personajes realmente, y eso me lo ha dado la actuación.
Se acaba de estrenar la película «El Hogar» en la que participas, estáis siendo nominados a muchísimos premios ¿os esperabais esto?
La verdad es que no, porque es una película de bajo presupuesto, pero es verdad que cuando leí el guion pensé que era algo diferente y que si se hacía bien, podríamos llegar a muchos festivales, pudiendo, a la vez, emocionar al público. El caso es que hasta que no la vi terminada no pude opinar. Verla terminada emociona mucho. Trabajar en una película muda es muy divertido porque no hay guion, bueno, hay guion pero no hay texto, entonces es improvisación. No se va a poner la voz, pero luego queda muy divertido porque realmente estamos improvisando y sacando el texto como queremos. Quedó francamente bien y como al final aceleran un poco, pues queda muy cómico.
¿Algún proyecto que nos puedas contar?
Claro, es de teatro y la obra se llama «La Comedia Sin Título«, de Federico García Lorca. Es una de las últimas obras que escribió antes de que le asesinaran y está inacabada, el director, Emilio Barrachina, la ha terminado sin tratar de imitar a Lorca, le ha dado un giro. Narra los últimos días de Lorca y de cómo le asesinan. Está muy bien porque el director es además periodista, se ha documentado a través del estudio que hace Miguel Caballero, y da un giro más a las investigaciones. Julio trata de alejarse de la política y mostrar lo que realmente pasó, yo creo que va a sorprender. Estrenamos en el teatro Campo Amor, y el actor protagonista es Fernando Guillén Cuervo, somos 11 actores en escena. Es un proyecto importante.
¿Y tu personaje?
Mi personaje es Esperanza Rosales, que realmente existió, de la familia de los Rosales, que acogieron y escondieron a Lorca los días anteriores a su asesinato. Es uno de los personajes que tienen gran peso en la obra, así que estoy muy contenta. Hemos empezado a ensayar y estrenamos el 7 de julio en el teatro Campo Amor, de Oviedo y luego iremos a Granada seguramente, después vendremos a Madrid. Estos dos últimos años he estado más parada por la tésis y el mundo académico, pero ahora vuelvo otra vez con muchísimas ganas.
