Redacción
Hotel boutique con todas las comodidades necesarias para descansar y respirar aire puro, a tan solo una hora de Barcelona
Hotel Mas La Boella es un hotel boutique ubicado en La Canonja, a tan solo ocho kilómetros de la ciudad de Tarragona, a dos minutos del Aeropuerto de Reus y a una hora de Barcelona. Un paraje único rodeado de naturaleza ideal para relajarse en una de sus 13 suites exquisitamente decoradas con mobiliario de diseño único, amplios ventanales, exclusivos amenities de la firma Natura Bissé, prensa ilimitada, carta de almohadas y camas tamaño king size diseñadas, más que para dormir, para soñar. Todo ello en un entorno donde la sensación de absoluta serenidad y encanto inunda cada rincón.
Las habitaciones del Hotel Mas La Boella están divididas en dos edificios, el Mas Vell, de estilo contemporáneo con diseño refinado; y el Mas Nou, con encanto vanguardista. Ocho de ellas tienen, además, balcón y dos, una amplia terraza privada, ideal para disfrutar del privilegiado clima Mediterráneo.
El hotel boutique mima a cada uno de sus huéspedes, ofreciendo servicios personalizados, una amplia oferta de actividades de ocio y entretenimiento y propuestas gastronómicas para brindar una experiencia de un 4 estrellas superior.
El espacio dispone de una maravillosa piscina exterior para disfrutar del descanso y tranquilidad y amplios jardines para deleitarse con agradables paseos. También cuenta con una zona de solárium con hamacas para tumbarse al sol. Y, bajo la sombra de su encantadora pérgola, puede degustarse, entre horas, el apetecible picoteo que ofrece el restaurante.
Mas La Boella es un pequeño hotel, con grandes y hermosos jardines, ideal para descansar, respirar aire puro y huir del bullicioso ritmo de las grandes ciudades. Es el paréntesis perfecto para olvidarse del trepidante ritmo de vida que, la mayoría, llevamos en nuestro día a día.
Espai Fortuny
Espai Fortuny, el Restaurante Mas La Boella es excepcional. Cuida al máximo la gastronomía que ofrece, pero también la exclusiva forma de ofrecerla. El restaurante, de cocina tradicional y mediterránea, cuenta con producto de proximidad de calidad excepcional, un servicio de lujo y un final para el recuerdo en uno de los enclaves más singulares de la Costa Dorada. Todo ello, de la mano del chef Manuel Ramírez.
En la entrada se encuentra una agradable sala-biblioteca ideal para tomar el aperitivo o esperar al resto de comensales. El salón tiene capacidad para un máximo de 45 personas y dispone de dos salas adjuntas para encuentros que requieran más privacidad. Además, cuenta con una bucólica terraza de verano espectacular con diez mesas que se encuentran perfectamente integradas en un cuidado jardín, poblado de naranjos, flores de azahar, magnolias, lavanda y romero y coronado por una parlotearte fontana de piedra; un auténtico oasis de naturaleza y relax que invita a vivir una experiencia gastronómica única.
