Redacción/ Fotos: Álvaro Serrano Sierra y Carlos Mira Manzano
La actriz bilbaína Nahia Laiz comienza su carrera artística en el teatro. Ha trabajado en series y películas de gran reconocimiento nacional e internacional. Su primer cortometraje como realizadora Los Hijos acumula más de 20 laureles entre selecciones y premios. El próximo 8 de noviembre estrenará como protagonista la cinta de terror The Book, del director Bernardo Hernández. Su primera incursión en este género no dejará indiferente a nadie.
Con ella hemos hablado de lo humano y de lo divino en esta entrevista.
Estrena como protagonista el próximo 8 de noviembre la cinta de terror, The Book, de Bernardo Hernández. ¿Cómo le llegó esta oportunidad?
¡De una manera muy directa! Habían conocido mi trabajo gracias a Hwidar y me ofrecieron el guion para leerlo. Lo devoré en una tarde y acepté.
Háblenos un poco más de su personaje Verónica
Es una mujer muy decidida. Está embarcada en un matrimonio donde no se siente lo suficientemente apoyada y aún así decide priorizar su camino propio. Es madre de una niña de seis años y ejerce como periodista de investigación. Tiene una vocación muy fuerte y una capacidad de entrega y compromiso a prueba de bombas. Es una mujer valiente que se siente sola, perdida y aún así sigue adelante.
¿Qué tiene Verónica de usted y usted de ella?
Recorremos caminos paralelos. No el mismo, pero sí movidas por la misma pasión y compromiso. Últimamente estoy dando vueltas a la idea de que tenemos dentro de nosotros mismos todas las posibilidades del mundo. Lo importante es elegir qué hacemos con eso y cómo nos construimos en la vida. Por eso, todos los personajes pueden tener algo nuestro y al revés. Actuar es investigar en lo más profundo del ser y validar todas las opciones para poder construir un personaje. Es lo más alejado de la mentira que se suele achacar a esta profesión.
The Book, Ten cuidado con lo que lees… Bastante sugerente este subtítulo. Pónganos en contexto, por favor
Es el verdadero protagonista de la película, aunque no hable. Es un libro mágico y misterioso. Sólo al abrirlo, Verónica podrá descubrir los misterios de su propia vida, pero para poder abrirlo ha de seguir unas pistas que acaban metiéndola en un buen lío. Además, bajo mi punto de vista, hace referencia a que la lectura es abrirse al mundo. En este caso a unos mundos muy oscuros, por eso lo de “ten cuidado…”.
Es la primera vez que protagoniza una peli de género como esta. ¿Qué es lo que más le ha impresionado de rodar terror?
¡Lo divertido que fue! Soy muy mala espectadora de género porque me afecta muchísimo, pero rodar así ha sido de lo más emocionante que me ha pasado. También fue muy duro. Estaba prácticamente sola durante toda la película, sin más actores – salvo al principio con Miguel Ramiro y al final con Abdelatif Hwidar – y eso supuso un gran reto. Los actores necesitamos de otros compañeros para crear escenas, momentos y en este caso Verónica emprende el viaje completamente sola y así se ha respetado a lo largo de todo el metraje. Es una apuesta muy fuerte. Aprendí muchísimo.
Y tras esta “terrible” experiencia, ¿podría decirnos por qué género se decanta más a la hora de dar vida a un personaje?
Me decanto por aventura, terror psicológico, lo poético. Me atraen las historias un poco “de otro mundo” con un halo onírico y todo lo que tenga que ver con aventura, bienvenido sea. En el terror me quedo, me ha enamorado. Lo que sí hago siempre es implicarme en proyectos que traigan un mensaje y un aprendizaje o una reflexión, sea cual sea el género en el que se enmarquen. Incluso si es comedia necesito que cuente algo. Huyo de lo simple y plano.
Para rodar una película de terror, ¿hace falta ser nada supersticiosa?
¡Qué buena pregunta! Nada o mucho. No sabría decirte. Yo no lo soy en mi día a día, aunque tengo mis propios rituales, pero desde luego, lo que sí o sí hace falta es entregarse al juego y a la magia. Confiar. Y para eso es cierto que la superstición no ayuda. Tienes que liberarte de prejuicios y confiar absolutamente en todo el equipo y en tu propio trabajo.
Seguro que tiene mil y una anécdotas del rodaje. ¿Nos puede contar alguna?
Había que rodar la escena de llegada a la casa donde ocurre la mayor parte de la historia. Por guión, una paloma me asustaba al abrir la puerta por primera vez. No se les ocurrió otra forma de hacerlo que ir soltando palomas hasta conseguir la toma perfecta. Una de ellas se me agarró al pelo un buen rato antes de salir volando. Creo que fue la toma que quedó como válida. Consiguieron que me asustara, y tras la toma perfecta, se liberó el estrés con unas buenas carcajadas.
CONTESTE EN DOS MINUTOS
¿A qué o a quién no le dedicaría ni un minuto de su vida?
Al ex de una amiga que es un tipo terrible. Digo esto después de habérselo dedicado. Siempre tengo un minuto para escuchar y valorar la historia de alguien. A partir de ahí, si la lías muy mal… nunca más. Y al tipo que me tangó una película entera. Gente con poco sentido de la humanidad y del respeto.
Descríbase en pocas palabras.
Apasionada, cabezota, divertida, emocional, amorosa, acogedora, directa, disfrutona, salvaje (imposible siempre describirse, es acotarse).
¿Qué es lo que más ama de su profesión?
Absolutamente todo. Las partes más oscuras también, son una gran escuela de vida. Por elegir una cosa, me quedo con la posibilidad que me da de conocer muchísima gente y gozar creando juntos.
La pregunta del millón. ¿Actriz, directora o productora?
Actriz. Fácil. Siempre. Lo demás son complementos gozosos de los que aprendo y herramientas que pongo en funcionamiento cuando quiero crear algo propio o contar algo que no encuentro o que no me llega la posibilidad de explorar desde otro lugar.
¿Si no fuera actriz?
No sería yo. Podría trabajar de cualquier cosa porque nos movemos en este sistema/mundo en que hay que pagar servicios con dinero, Soy actriz cuando leo cuentos a niños, cuando escucho a una amiga con todos los sentidos, cuando cuento una vivencia con toda la pasión y los detalles del mundo. No sólo cuando salgo en una pantalla o estoy en un escenario.
¿Qué es lo que más le relaja?
Saber que mis hijos están bien y la naturaleza. Poco más hace falta.
De los personajes que le ha tocado interpretar en su larga carrera, ¿con cuál se quedaría y por qué?
Uno que aún estoy construyendo, para teatro. Es una mujer apasionante de una cultura lejana, pero aún no puedo contar nada. Se verá en breve. En cine me quedo con esta Verónica. Se aceptan ofertas que suban la apuesta.
Una canción que le acompañe siempre.
Soy poco fiel en la música. Siempre descubro novedades o clásicos y voy navegando según mi ánimo lo requiera.
Un director de cine con quien se muera por trabajar.
Me pillas en que no me muero yo ya por nadie. Eso sí, me interesan todos y todas. Es maravilloso seguir descubriendo.
Le queda por aprender…
A perdonarme algunas cosas en ciertos momentos. Y todo. Siempre queda todo por aprender una y otra vez, incluso sobre algo que creíamos sabido. Creo que es sanísimo y enriquecedor cuestionarse siempre.
Recomiéndenos una película para curar las heridas del alma.
Cada alma es un mundo y necesita cosas diferentes. Siempre, Cinema Paradiso como opción comodín y universal. Little Miss Sunshine también.
Y, por último. Esa peli que no deja de ver una y otra vez.
Puedo repetir poco las películas, me da la sensación de que siempre hay alguna otra cosa por descubrir, sobre todo hoy en día con tanta oferta de todas partes. ¡Es impresionante poder ver cine sueco o iraní y descubrir lo que se hace allí! Eso hace unos años era sólo para unos pocos. Además, soy muy ecléctica – de Cinema Paradiso a El Último Mohicano, por ejemplo, hay un mundo.
SINOPSIS THE BOOK
Verónica es una joven periodista casada y con una hija pequeña que ha dejado a cargo de su marido durante un fin de semana. La joven necesita encontrar respuestas, necesita saber por qué dos de sus personas más queridas actuaron de la misma forma, e intuye que solo encontrará respuestas que arrojen un poco de luz a su problema familiar rebuscando en sus orígenes.
Su investigación le conducirá hasta un misterioso libro que se encuentra atado con unas tijeras amarradas en su interior.
Una especie de diario que viene acompañado de una nota donde se explican los pasos previos que se deben de dar antes de abrir este peculiar libro.
De este modo, la joven periodista comenzará su particular trabajo que irá quedando registrado en una cámara y una grabadora de mano. Verónica mantendrá una lucha tanto interna contra su propia fe, como otra externa contra ese libro que trata de imponer sus despiadadas normas. Veremos como una simple mortal se enfrenta sola a las fuerzas de la oscuridad en una batalla sin cuartel que ocurrirá por las dependencias de esa casa abandonada en medio de la nada.
Hasta que, en un momento dado, casi agotada y extenuada por todo lo que acontece, decide llevar a suelo sagrado ese libro que parece maldito, a una pequeña capilla que existe junto al caserío. Allí, las fuerzas de la luz y la oscuridad, de lo carnal y lo espiritual, del bien y del mal, se enfrentarán por volver a cerrar otra vez ese libro maldito.
