Por José Agustín Solís/ Fotos: M.C.
Mónica Calzetta, una destacada figura en el mundo del ajedrez, ha navegado por el tablero de este juego con la destreza y la estrategia de no solo una gran jugadora, sino también como una ferviente promotora de este arte-ciencia. Desde sus inicios en el colegio hasta alcanzar el pico de su carrera ganando el Mundial Senior +50, Calzetta ha dedicado su vida al ajedrez, persiguiendo la excelencia y compartiendo su pasión por el juego. En esta entrevista, nos adentramos en su viaje, explorando sus motivaciones, desafíos, y la influencia que ha tenido en su desarrollo tanto personal como profesional. A través de sus respuestas, nos ofrece una mirada íntima a su enfoque del juego, su evolución como jugadora, y su visión para el futuro del ajedrez.
¿Cómo descubriste tu pasión por el ajedrez y qué te motivó a perseguirlo profesionalmente?
Me enseñaron a jugar en el colegio y al poco tiempo me cautivó la belleza creativa de un juego lleno de combinaciones y la emoción que sentía en las competiciones me apasionó. Cuando tenía 19 años, en 1992, fui seleccionada por primera vez para participar en las Olimpiadas de ajedrez de Manila. Ese mismo año jugué también con la selección universitaria española que ganó el mundial universitario en Amberes, lo que me motivó para dedicarme en exclusiva al ajedrez.
¿Hay alguna partida o torneo que consideres como el más significativo de tu carrera hasta ahora?
Siempre he relatado que los dos Zonales, que los conformaban 15 países europeos y que gané de forma sorpresiva, ya que no era favorita, de hecho, en uno era la penúltima del ranking, fueron muy importantes para mí. Pero ahora es la victoria en el Mundial Senior +50, que ha tenido una gran repercusión mediática, y muy determinante fue la antepenúltima partida donde gané y me puse líder fiel a mi estilo sacrificando una pieza.
El ajedrez es tanto un arte como una ciencia. ¿Cuál es tu enfoque personal para prepararte antes de una partida importante?
Estudio el juego de mi rival para saber dónde – en qué apertura o fase del juego- se encuentra más incómodo, intento así también prever qué apertura o defensa me jugará y la estudio en mi repertorio de aperturas, muchas veces incorporando alguna variación o novedad que se adapte mejor a mi juego.
En el mundo del ajedrez, ¿quién ha sido tu mayor mentor(a) o influencia, y de qué manera ha impactado en tu desarrollo como jugadora?
Indudablemente mi marido y entrenador Sergio Estremera, hasta que lo conocí era reacia a dedicar mucho tiempo a las aperturas porque me interesaban más otras fases del juego, pero no llegaba en buenas condiciones a esas fases del medio juego de las combinaciones o el final, ya que me trababa en la primera fase de la apertura, mejoré mucho con él en las aperturas y en el análisis de las posiciones.
El estudio continuo es esencial en el ajedrez. ¿Cómo mantienes tu juego actualizado con las nuevas teorías y aperturas?
Es muy importante estar al día con tus aperturas. Sigo las retransmisiones online de los principales torneos para ver las novedades y tendencias. Por ejemplo, esta semana estoy escuchando durante horas al excampeón del mundo Anand comentando los torneos de Candidatos.
El ajedrez requiere de una fortaleza mental considerable. ¿Tienes alguna técnica o rutina para manejar la presión durante las competencias?
Sí, de hecho, soy muy cabezota, jaja… Huyo como la peste de comentarios como “seguro que ya ganas el torneo” o “a esta jugadora le ganas” que solo pueden minarte. Intento pensar en hacer buenas jugadas y no en resultados. Me parece importante mantener el equilibrio sin grandes euforias cuando se gana una partida o se obtiene ventaja durante la misma, ni bajones cuando se tuerce una partida, y seguir luchando hasta el final con determinación.
Cada jugador de ajedrez tiene su propio estilo. ¿Cómo describirías el tuyo y cómo ha evolucionado con el tiempo?
Me gusta tener la iniciativa en el juego y para conseguirlo con negras, suelo jugar Gambitos sacrificando un peón a cambio de tener una posición más dinámica que mi rival. No he variado en este aspecto con el tiempo (no me he asentado :-D),
La tecnología ha cambiado la forma en que se juega y se estudia el ajedrez. ¿Cuál es tu opinión sobre el uso de software de ajedrez en la preparación de los jugadores?
Actualmente el estudio es mucho más rápido con el software, tal vez lo más complicado es elegir entre tanto material de estudio, además, las aperturas actualmente se verifican continuamente con los módulos de análisis para que no tengan fallas. Cuando comencé a jugar solo teníamos los libros para estudiar aperturas y podía contener errores, recuerdo en una partida seguir de memoria una línea de apertura de un libro hasta que se ponía con juego complicado y cuando me planté en esa posición vi que solo un bando lo tenía entre complicado y muy mal y era el mío…
Las victorias son importantes, pero también lo son las lecciones de las derrotas. ¿Podrías compartir una experiencia de aprendizaje que haya tenido un impacto profundo en tu juego?
En ajedrez se aprende mucho más de las derrotas, analizamos por qué hemos perdido y mejoramos para las siguientes partidas. Al acabar de perder contra un maestro, me dijo que había estudiado en mis partidas que tenía tendencia a lanzarme en las combinaciones cuando eran vistosas, como una atracción fatal y me provocó a que combinase en falso. Así aprendí que una cosa es lo que me gustaría crear y otra es la realidad y los límites que la posición permite. La armonía y belleza del juego está en su precisión, los fuegos artificiales por muy vistosos que sean si son descontrolados son imperfectos.
Mirando hacia el futuro, ¿cuáles son tus objetivos y aspiraciones dentro del mundo del ajedrez?
Mi primer libro fue “Viaje al Reino del Ajedrez” y continuo feliz en él. La vida deportiva de los ajedrecistas es longeva y continuaré compitiendo, intentaré revalidar el título mundial este año. Quiero promover el ajedrez para que más jugadoras se acerquen y disfruten de este apasionante mundo.
En tu opinión, ¿cómo puede el ajedrez contribuir al desarrollo personal y profesional fuera del tablero?
El ajedrez nos enseña a elegir, a través del análisis constante de las distintas posibilidades, cuál es la opción correcta, a ser ecuánimes, a ser flexibles en los planes que nos trazamos dependiendo de las circunstancias y a reprogramarlos en un tiempo limitado. En la vorágine actual de cambios en progresión ascendente, es una herramienta muy útil en la enseñanza, por eso ha sido recomendada la introducción del ajedrez en las escuelas por unanimidad, tanto en el parlamento español como en el europeo.
Háblanos sobre una partida que haya sido particularmente memorable para ti, ¿Qué la hizo tan especial?
En 1999 en el campeonato de Europa de Selecciones nacionales, después de ganar contra Rusia me enfrenté a Georgia, contra la campeona del Interzonal y candidata al título mundial y también gané, ambas partidas muy vistosas y ganarles a las dos potencias de ajedrez cuando yo aún no tenía el título de Gran Maestra y ni mucho menos el apoyo que tenían ellas: fue muy emotivo para mí.
El ajedrez es un campo en el que mujeres y hombres compiten juntos. Sin embargo, las mujeres son una minoría en el ajedrez de élite. En tu experiencia, ¿Cómo ha sido navegar en este entorno y qué cambios te gustaría ver?
Entre mis compañeros ajedrecistas el ambiente es muy bueno: compartimos la misma pasión por el ajedrez. Cuando comencé a jugar aún había menos jugadoras que ahora, pero por suerte el número va en aumento. Me encantaría sobre todo ver cambios a nivel federativo con menos señores que no respetan nuestra dedicación.
Perteneces a las Asociación de mujeres para el deporte profesional. ¿En qué te están ayudando desde allí? ¿Qué destacarías del apoyo que os brindan?
Me parece importante hacer causa común para mejorar las condiciones y la visibilidad de las deportistas.
La resiliencia es crucial en cualquier carrera, pero especialmente en el deporte de alto nivel. ¿Cómo te recuperas y sigues adelante después de un resultado adverso?
Aunque me duela mucho una derrota, consigo focalizar en la siguiente partida, preparándola y dedicándole toda mi concentración y energía, nada se consigue perdiendo el tiempo con lamentaciones. Y como dijo Nelson Mandela “Un ganador es un soñador que nunca se rinde”