Texto: Sandra Cuenca/ Fotos: T.S.
La guerra de Rusia contra Ucrania está dejando a su paso imágenes devastadoras e historias que ponen la piel de gallina. Familias que abandonan sus casas y sus ciudades para huir de la barbarie, ucranianos y ucranianas que ven, desde muchos kilómetros de distancia, como su familia y amigos están sufriendo los bombardeos en Ucrania por parte de Rusia. No pueden ayudarles, solo pueden hablar con ellos por teléfono y así saber como están, mientras la ira, la impotencia y la tristeza se apoderan de ellos.
Tania Shostak es ucraniana, tiene 45 años, es maquilladora profesional y licenciada en Bellas Artes. Nació en una ciudad del centro del país, Kirovograd y vive en España desde hace más de 15 años. Tomó la decisión de venir a España porque creía que aquí tendría más oportunidades de crecer profesionalmente y de ganarse la vida mejor que en su país y así, además, poder ayudar a su familia e incluso si fuera posible traerlos a ellos también. «Hay que tener en cuenta que entonces, hace ya más de quince años, España era considerada, en Ucrania, como un país donde se podía vivir bien, en libertad y donde sería posible tener buenas oportunidades en mi profesión«, nos cuenta Tania y continua, «En general, creo que acerté en mi decisión, aunque, como todo el mundo, las cosas nunca son siempre fáciles y he pasado por momentos también difíciles que casi hacen que me arrepintiera, incluso en alguna ocasión casi decido volver a mi país«.
¿Cómo cambia tu vida al llegar a España?
Al principio, para mi fue muy difícil, porque no conocía el idioma y solo hablaba inglés, ucraniano y ruso, además de algo de francés e italiano. Vine prácticamente con una maleta y una ilusión enorme por trabajar, ser libre e independiente en todos los sentidos, de mejorar y de poder ayudar a los míos. Siempre, desde niña, he sido muy independiente, y eso se lo debo a mi familia que no tenía otra alternativa que trabajar y trabajar para poder tener cubiertas nada más que las necesidades básicas. En Ucrania, por desgracia y con una clara influencia del mundo soviético, ni hubo ni hay el nivel de vida, ni el desarrollo de todo tipo de infraestructuras, que hay aquí en España. Todo es mucho más pobre que aquí, los sueldos son muy bajos y, porque no decirlo, aun se notaba la poca atención que los gobiernos anteriores prestaban al desarrollo de mi país y si mucha, lamentablemente, a la corrupción. España me recibió como una más. Los españoles y, muy en especial, Madrid, son un pueblo abierto, con una mentalidad maravillosa para atender a todo aquél que viene a buscarse la vida. Tanto es así, que en algo menos de nueve meses logre aprender español y tener mis primeros trabajos para poder ganarme la vida, todos muy diferentes, hasta que pude obtener todos los papeles necesarios para estar en España con toda la legalidad. Lo mejor de todo es que aquí es donde encontré a la persona adecuada para formar una familia y juntos con nuestra hija, seguir adelante, como debe ser…
Rusia ha empezado la guerra contra tu país, sé que tienes familia allí, ¿Cómo estás viviendo tú esta situación desde aquí? ¿Y tu familia?
La verdad es que la preocupación y el miedo es total. El primer día, cuando me avisaron mi madre y mi hermana de madrugada, quedé en estado de Shock… lo primero que pensé, junto con mi marido, fue en buscar una salida inmediata para ellos, pero la rapidez con la que está ocurriendo todo, junto con el hecho de que en Ucrania no es fácil moverse ahora, nos han impedido lograr el objetivo de sacarlos de allí. La verdad es que nunca piensas seriamente que una cosa así vaya a suceder en tu país y eso, a pesar de que todo esto, para mí, realmente comenzó en el año 2014 con la toma de la península de Crimea. Mi familia directa, por ahora, está relativamente tranquila pero, sin duda alguna, con mucho miedo, pues las últimas noticias no son esperanzadoras ya que las tropas rusas se están acercando a la ciudad y, por tanto, están tratando de adoptar algunas medidas de seguridad básicas, como lograr alimentos, energía para los móviles y, aunque me parece mentira decirlo, buscar refugios antiaéreos para protegerse en caso de bombardeos, que ya los hubo contra zonas militares cercanas a mi ciudad. Mi madre, mi hermana y su marido, junto con mi sobrina de tres años, hacen lo que pueden. Hemos de tener en cuenta que, lamentablemente, en Ucrania se vive desde hace años bajo amenazas constantes del gobierno ruso, esto que digo, es así y muchísimos ucranianos lo pueden atestiguar. Sin embargo, otros familiares y amigos, junto con sus hijos, están aislados y sin defensas en zonas donde los ataques son grandes pero no solo de ahora, sino incluso desde el año 2014, que no olvidemos que es el año en que Rusia y su gobierno tomaron a la fuerza Donetsk y Luhansk, así como otras zonas de Odessa y la Península de Crimea. Por eso digo que este es un paso más de Rusia contra mi país, y que pretende invadirlo, anularlo y tomarlo para sí… es una guerra total y al margen de lo que diga la Comunidad Internacional… que, por ahora, la verdad no vemos que vaya a ir en la dirección de parar esta guerra de forma contundente.
Imagino que estarás pasando por un momento muy duro, desde España, ¿Qué pedirías desde aquí?
La verdad es que sí. Es muy duro. Cualquier persona me entenderá cuando digo que siento miedo de una guerra en mi país, imagina por un instante ese miedo increíble de los nuestros que permanecen allí, sin poder hacer casi nada, salvo guarecerse donde pueden. También me preocupa que es una guerra que si Occidente no sabe afrontar, la libertad y la vida de mucha gente está en peligro por culpa de oscuros intereses de Putin y eso, sencillamente, creo que no puede ser, que no se puede permitir.
¿Cómo está tu familia? ¿Puedes hablar con ellos?
Como te decía antes, ahora están relativamente tranquilos aunque con miedo, lógicamente. En mi ciudad tan solo en 24 horas ya faltan algunos suministros de primera necesidad como el pan, entre otros. Afortunadamente podemos comunicarnos casi constantemente con los móviles y las diferentes plataformas que hay, pero no sabemos hasta cuándo. Los ucranianos somos un pueblo duro, acostumbrado a la dificultad, pero sin demasiados medios para defendernos por desgracia, y por eso nuestro gobierno pide ayuda real a la Unión Europa, a la OTAN y a Occidente. Me siento orgullosa de mi país y de mis compatriotas que están defendiéndose con todo lo que tienen a su alcance contra un tirano y su ejercito. Tenemos mucha fe y esperanza de que podamos salir delante de esta afrenta, de esta guerra, pero es obvio que necesitamos ayuda para defender nuestro país de un ataque injustificado y con el que se pretende trasladar únicamente un mensaje totalitario y realmente comunista personificado en Putin y que nos amenaza a todos los que en absoluto pensamos como él y los suyos.
¿Hay posibilidad de que puedan salir del país?
Desgraciadamente, y por ahora, no. Estamos buscando todas las fórmulas posibles para lograrlo, sobre todo para mi madre, hermana y mi pequeña sobrinita. Sabemos que no dejan salir del país a los hombres mayores de 18 años, pero no cesaremos en el intento de sacarlos a todos cuanto antes. Si que me gustaría decir que agradezco todas las muestras de apoyo y cariño que me envía mucha gente y que hacen extensivas a mi país, a mis compatriotas y al gobierno que está intentando con todos sus medios detener esta guerra. Solo puedo esperar que esto termine pronto y con los menores daños posibles.
Desde aquí mandamos mucho animo y mucha fuerza a todos los ucranianos y ucranianas, esto tiene que acabar ya.
