Por Jaime Carrancio González
Las auroras boreales, un fenómeno natural fascinante y mágico que durante siglos ha cautivado a aquellos que tienen la suerte de presenciarlo, normalmente se asocian con regiones polares como Noruega, Islandia o Canadá. Sin embargo, en un giro sorprendente, los cielos de España se preparan para recibir este espectáculo celestial entre 2024 y 2025.
Este fenómeno extraordinario se debe a un ciclo solar excepcionalmente activo que ha llevado a una mayor actividad de las manchas solares y, en consecuencia, a una intensificación de las tormentas solares. Estas tormentas, compuestas por partículas cargadas expulsadas por el Sol, interactúan con la magnetosfera de la Tierra, produciendo las deslumbrantes luces danzantes conocidas como auroras boreales.
Aunque España está situada mucho más al sur de las regiones típicamente asociadas con las auroras boreales, la mayor actividad solar prevista para este período significa que estas luces brillantes y coloridas podrían ser visibles incluso en latitudes más bajas.
Los científicos y entusiastas del espacio están anticipando con gran expectación este evento único. Además del asombro estético que las auroras boreales ofrecen, también brindan una oportunidad invaluable para la investigación científica. Los investigadores están ansiosos por estudiar la interacción entre las partículas solares y la magnetosfera terrestre en diferentes condiciones geográficas y geomagnéticas.
Para aquellos que deseen presenciar este evento celestial, será crucial estar atentos a las condiciones meteorológicas y a las predicciones de actividad solar. Las auroras boreales son impredecibles en su aparición y pueden ser influenciadas por diversos factores, como la actividad solar en tiempo real y la claridad del cielo.
Se cree que los mejores meses para presenciar las auroras boreales en España serán de octubre a marzo, debido a la época invernal. Durante estos meses, las noches más largas y oscuras proporcionan el telón de fondo perfecto para que las luces del norte se destaquen en todo su esplendor. Con el cielo despejado y las condiciones climáticas adecuadas, los observadores podrán deleitarse con este espectáculo celestial único.
En cuanto a los lugares privilegiados para avistar las auroras boreales, se espera que las regiones del norte de España sean los puntos de observación más destacados. Regiones como Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco y Navarra, debido a su ubicación en el norte y su proximidad al oceano, estarán entre los lugares más propicios para presenciar este fenómeno. La combinación de cielos oscuros y abiertos, alejados de las luces de las ciudades, proporcionará un telón de fondo perfecto para que las auroras brillen en todo su esplendor.
También se anticipa que Cataluña será un lugar notable para la observación de las auroras boreales. Aunque no está tan al norte como otras regiones, su ubicación costera y su relativa oscuridad nocturna podrían ofrecer posibilidades para avistar este fenómeno celestial.
Por otro lado, en el sur del país, Extremadura se perfila como un lugar prometedor para la observación de las auroras boreales. La baja contaminación lumínica en esta región ofrece condiciones ideales para disfrutar de la danza de colores en el cielo nocturno. Con cielos oscuros y despejados, los observadores en Extremadura tendrán la oportunidad de maravillarse con este fenómeno celestial de una manera única y sin igual.
Además, aquellos que deseen capturar este momento mágico con sus cámaras deberán estar preparados para aprovechar al máximo las condiciones de luz nocturna. Una exposición prolongada y un trípode estable serán herramientas esenciales para capturar la belleza de las auroras boreales en todo su esplendor. También, existen aplicaciones que avisan tanto de las probabilidades de avistar una aurora boreal dependiendo del día la hora, como otras apps que emiten una alarma avisando de cuando alguien ha avistado una en la región.
En este emocionante período en el que España se prepara para ser testigo de las auroras boreales, la anticipación y el entusiasmo están en su apogeo. Los cielos del país se convierten en un lienzo vivo donde la naturaleza despliega su más deslumbrante espectáculo, desafiando las expectativas geográficas y cautivando a aquellos que se sumergen en su magia efímera. Desde el norte hasta el sur, los observadores y fotógrafos se preparan para ser testigos y capturar la belleza efímera de las luces del norte bailando en la oscuridad, mientras que los científicos esperan ansiosamente las oportunidades de estudio que este evento sin igual proporcionará.
